He aunado en esta firma de dermocosmética natural mi espíritu emprendedor, mi experiencia empresarial, y mi profundo conocimiento botánico, para formular unos productos únicos, que hasta ahora no existían en las farmacias.
Quiero que trasformemos la rutina de belleza en un momento único y pausado, y que cuidar nuestra piel se convierta en el instante más esperado del día. Yo lo heredé de mi familia, especialmente de mi bisabuela Sarah Becquer, una americana exquisita y sofisticada. Recuerdo que en su infancia se quedaba embelesada cuando le narraban las historias de su antepasada.
Esta filosofía de vida de Sarah Becquer para transformar el gesto más cotidiano en un momento sublime es lo que quiero transmitir con el universo SB, y así, convertir la rutina del cuidado de la piel, en un tiempo para deleitarnos con las sensaciones, aromas y texturas de nuestra dermocosmética natural y sofisticada.